Enrique Flores, uno de los ilustradores españoles más prestigiosos, nos ofrece una historia sencilla y de final sorprendente sobre la amistad y los colores. De paso, nos demuestra que la ciudad puede ser un escenario repleto de poesía y delicadeza.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias coma de terceiros, para mellorar a súa experiencia de navegación. Se continúa navegando, consideramos que acepta o seu uso.Máis información