Ahora, cuando vuelvo a leer lo escrito o miro los dibujos hechos tiempo atrás, entiendo que me gustan los diarios porque en un puñado de páginas en blanco cabe todo el universo.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias coma de terceiros, para mellorar a súa experiencia de navegación. Se continúa navegando, consideramos que acepta o seu uso.Máis información